Tuvimos la oportunidad de probar a fondo la nueva interfaz gráfica de Xbox One, notando obviamente, como la mayoría de prensa, un poco de confusión durante la navegación y también la sensación de "lentitud" que Microsoft no ha ocultado y que solucionará con futuras actualizaciones. . Nada grave ni llamativo entonces, estamos hablando de imperfecciones juveniles. Mucho más digno de atención es el reproductor de Blu-Ray. Una vez comprobado que se han encontrado muchos modelos defectuosos, informamos el caso, siempre mínimo en términos de porcentaje, que puede llevar a la consola a no leer siquiera el disco una vez insertado. En concreto, y hablando por experiencia, hemos notado que incluso con discos en perfecto estado de salud, la consola en ocasiones se niega a empezar a reproducirlos. Lo más obvio sería reiniciar, pero a veces este método clásico y debido funciona, otras veces no. Por pura casualidad, este escritor no insertó bien un disco y escuchó el ruido típico del jugador que intenta "tirar" del juego sin lograrlo. Una vez insertada correctamente, la lectura vuelve a funcionar. Siguiendo la lógica, pensamos que el modo de lectura por un error de software no arranca y por ello es preferible reiniciar la consola, y por si fuera poco, aplicar este pequeño truco de una ama de casa nerd del siglo XXI. : Inserte medio centímetro el disco del reproductor para que intente insertarlo en la consola pero falle. Al final del “ruido” que hacen las ruedas al final del ralentí: empujar el disco correctamente. En este punto, la lectura debería reanudarse sin problemas. Puede parecer una tontería pero nos ha funcionado varias veces. Sin duda, es un problema de software, ya que ni el reproductor ni el Blu-Ray en posesión están dañados.